Lavazza presenta su primer Informe de Sostenibilidad
Coincidiendo con el año en que la empresa celebra su 120 aniversario y en que se celebra la Exposición Universal de Milán, dedicada a la alimentación y a la agricultura, Lavazza presenta su primer Informe de Sostenibilidad en el Hub de Sostenibilidad de Lavazza en Cascina Cuccagna.
La redacción de este informe se ajusta a las directrices GRI (Global Reporting Initiative) en su versión más actualizada, la GRI-G4. Este informe cubre un período de tres años, del 2012 al 2014, y su objetivo es dar a conocer, de forma clara, comparable y medible la actuación de la empresa en el campo de la sostenibilidad económica, social y medioambiental.
Este informe será presentado por los dos vicepresidentes de la compañía: Giuseppe y Marco Lavazza, junto con socios estratégicos que han acompañado a Lavazza en este viaje a través de la: Carlo Petrini, fundador del movimiento Slow Food y compañero de viaje de Lavazza durante más de 20 años, que hoy comparte con ella el proyecto Defensores de la Tierra; Cino Zucchi, el arquitecto que ha diseñado la nueva sede social de Lavazza. Este edificio, que abrirá sus puertas en 2016, no solo opta al Certificado LEED Gold (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental), sino que contribuye a revitalizar, con un positivo impacto social, todo un barrio de la ciudad de Turín; Ralph Appelbaum, el arquitecto a cargo del Museo Lavazza, en que el pasado mira hacia el futuro; Ferran Adrià, fundador de la Fundación elBulli y con el que Lavazza coopera desde el 2000 en el descubrimiento, a partir de la nutrición, de los procesos de la creatividad; Maurizia Iachino, presidenta de Oxfam Italia, con la que Lavazza está desarrollando un proyecto de sostenibilidad económica, social y medioambiental en Haití y República Dominicana; y Catia Bastioli, directora ejecutiva de Novamont, cuyo apoyo técnico ha permitido a Lavazza lanzar una cápsula biodegradable y compostable, en la línea de su enfoque de economía circular.
En un proceso de creación conjunta con Lavazza, la participación de cada uno de ellos ha contribuido a conseguir un enfoque de sostenibilidad integral. “La sostenibilidad no es un viaje en solitario. Al contrario, el hecho de integrar experiencias diversas y variadas en el modelo empresarial, con un enfoque sistémico, es esencial. La única forma de que las empresas puedan seguir creciendo es creando valor compartido con todas las partes implicadas, tanto internas como externas, e invirtiendo recursos de forma regular para conseguir procesos de producción más sostenibles y eficientes”, comenta Giuseppe Lavazza.
Dos ejemplos concretizan el enfoque de Lavazza respecto a la sostenibilidad: la Fundación Giuseppe y Pericle Lavazza y su nueva sede social. En 2004 se constituyó oficialmente la Fundación Giuseppe y Pericle Lavazza, en homenaje a la segunda generación de la familia. El objetivo de esta Fundación es concebir e implementar proyectos internacionales en apoyo a las comunidades productoras en países productores de café, fomentando, a su vez, la mejora de sus condiciones económicas y sociales. En el trienio que va del 2012 al 2014, las donaciones a la Fundación aumentaron considerablemente (+166%), pasando de 750.000 euros en 2012 a unos 2 millones de euros aproximadamente en 2014. Esto ha permitido a la Fundación financiar 34 proyectos repartidos en 11 países de 3 continentes, con la implicación de más de 65.000 productores de café.
La nueva sede social en Turín da fe de la sensibilidad de Lavazza frente a la herencia histórica y cultural de la ciudad, con la idea de crear un entorno laboral innovador y funcional. Este proyecto, en el que Lavazza ha invertido más de 100 millones de euros, ha contado con la implicación de las instituciones y la comunidad local desde sus inicios. Los trabajadores de Lavazza empleados en esta nueva sede social desarrollarán su trabajo en un entorno laboral que estimula el espíritu de equipo, la transparencia y el bienestar personal. A su vez, las comunidades del entorno se beneficiarán de las ventajas de una zona completamente revitalizada.
Coincidiendo con el año en que la empresa celebra su 120 aniversario y en que se celebra la Exposición Universal de Milán, dedicada a la alimentación y a la agricultura, Lavazza presenta su primer Informe de Sostenibilidad en el Hub de Sostenibilidad de Lavazza en Cascina Cuccagna.
La redacción de este informe se ajusta a las directrices GRI (Global Reporting Initiative) en su versión más actualizada, la GRI-G4. Este informe cubre un período de tres años, del 2012 al 2014, y su objetivo es dar a conocer, de forma clara, comparable y medible la actuación de la empresa en el campo de la sostenibilidad económica, social y medioambiental.
Este informe será presentado por los dos vicepresidentes de la compañía: Giuseppe y Marco Lavazza, junto con socios estratégicos que han acompañado a Lavazza en este viaje a través de la: Carlo Petrini, fundador del movimiento Slow Food y compañero de viaje de Lavazza durante más de 20 años, que hoy comparte con ella el proyecto Defensores de la Tierra; Cino Zucchi, el arquitecto que ha diseñado la nueva sede social de Lavazza. Este edificio, que abrirá sus puertas en 2016, no solo opta al Certificado LEED Gold (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental), sino que contribuye a revitalizar, con un positivo impacto social, todo un barrio de la ciudad de Turín; Ralph Appelbaum, el arquitecto a cargo del Museo Lavazza, en que el pasado mira hacia el futuro; Ferran Adrià, fundador de la Fundación elBulli y con el que Lavazza coopera desde el 2000 en el descubrimiento, a partir de la nutrición, de los procesos de la creatividad; Maurizia Iachino, presidenta de Oxfam Italia, con la que Lavazza está desarrollando un proyecto de sostenibilidad económica, social y medioambiental en Haití y República Dominicana; y Catia Bastioli, directora ejecutiva de Novamont, cuyo apoyo técnico ha permitido a Lavazza lanzar una cápsula biodegradable y compostable, en la línea de su enfoque de economía circular.
En un proceso de creación conjunta con Lavazza, la participación de cada uno de ellos ha contribuido a conseguir un enfoque de sostenibilidad integral. “La sostenibilidad no es un viaje en solitario. Al contrario, el hecho de integrar experiencias diversas y variadas en el modelo empresarial, con un enfoque sistémico, es esencial. La única forma de que las empresas puedan seguir creciendo es creando valor compartido con todas las partes implicadas, tanto internas como externas, e invirtiendo recursos de forma regular para conseguir procesos de producción más sostenibles y eficientes”, comenta Giuseppe Lavazza.
Dos ejemplos concretizan el enfoque de Lavazza respecto a la sostenibilidad: la Fundación Giuseppe y Pericle Lavazza y su nueva sede social. En 2004 se constituyó oficialmente la Fundación Giuseppe y Pericle Lavazza, en homenaje a la segunda generación de la familia. El objetivo de esta Fundación es concebir e implementar proyectos internacionales en apoyo a las comunidades productoras en países productores de café, fomentando, a su vez, la mejora de sus condiciones económicas y sociales. En el trienio que va del 2012 al 2014, las donaciones a la Fundación aumentaron considerablemente (+166%), pasando de 750.000 euros en 2012 a unos 2 millones de euros aproximadamente en 2014. Esto ha permitido a la Fundación financiar 34 proyectos repartidos en 11 países de 3 continentes, con la implicación de más de 65.000 productores de café.
La nueva sede social en Turín da fe de la sensibilidad de Lavazza frente a la herencia histórica y cultural de la ciudad, con la idea de crear un entorno laboral innovador y funcional. Este proyecto, en el que Lavazza ha invertido más de 100 millones de euros, ha contado con la implicación de las instituciones y la comunidad local desde sus inicios. Los trabajadores de Lavazza empleados en esta nueva sede social desarrollarán su trabajo en un entorno laboral que estimula el espíritu de equipo, la transparencia y el bienestar personal. A su vez, las comunidades del entorno se beneficiarán de las ventajas de una zona completamente revitalizada.
