La semFYC a favor del impuesto a las bebidas azucaradas en el Día Mundial de la Alimentación
El pasado 16 de octubre se celebró el Día Mundial de la Alimentación, convocado anualmente por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y, por este motivo, la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) a través del Programa de Actividades Preventivas y Promoción de la Salud dio a conocer un conjunto de recomendaciones de revisión de la tradicional pirámide alimenticia. Para la sociedad, el elemento clave e indispensable es la ubicación en la base de los vegetales frescos, como fundamento de una alimentación saludable, a consumir en todas las comidas del día, así como la reducción en las recomendaciones del consumo de alimentos ricos en hidratos de carbono, de cualquier origen, no sólo azúcares
Por otro lado, la semFYC ha aprovechado para dejar clara su postura en torno al consumo de bebidas azucaradas. “En términos alimentarios, el consumo regular de bebidas azucaradas y su introducción en la dieta es uno de los elementos que más significativamente ha contribuido al aumento de la tasa de obesidad. Hay que tener en cuenta que una lata de refresco contiene alrededor de 35 gramos de azúcar y se corresponde con 140 calorías”, explica Rodrigo Córdoba García coordinador del Grupo de Educación Sanitaria y Promoción de la Salud del PAPPS de semFYC.
Con el objetivo de actuar sobre una de las causas que generan mayor carga de enfermedad, este Grupo de la Sociedad se ha posicionado a favor del impuesto especial sobre estas bebidas azucaradas, ya que estima que un impuesto del 20% sobre el precio básico podría lograr, en nuestro país, una reducción efectiva del consumo de calorías en la dieta del 4,7%. Este porcentaje se traduciría en una pérdida de peso corporal de 725 gramos por año como promedio.
“La batalla por los impuestos sobre las bebidas azucaradas ha empezado ya a nivel mundial, y es la Organización Mundial de la Salud OMS la impulsora de la misma”, señala Córdoba García. En este sentido, Cataluña empezó aplicar el impuesto en mayo de 2017 y los datos de diferentes estudios independientes han mostrado una reducción del consumo.